DE LO ESENCIAL Y LO INHUMANO
De mi mente a mi cuerpo va mi lamento
mas sufrir si se puede y no miremos el tiempo
Tengo un hilo de plata y tus recuerdos
quiero volar la cometa de mi sufrimiento
nunca pensé el dibujo del mañana y sentí
como sería tu sonrisa tras mi ventana
cuando la piel envejece y escuchas lo absurdo
como lo esencial se va de este mundo
y el fango de nuestras necesidades imperiosas
crece como una piraña en una cloaca de focas
y ese hilo cada vez mas fino y alargado, que lejos
se va de mi mano,y suspiro y no arreglo este entuerto
y ya las tumbas sin fuegos fatuos,ennegrecen de hollín
como el corazón de un hermano,y ya no hay odio
ni rencor,ni dolor mas grande que pensar en lo dado.
Pero en abril florece la sonrisa pero es hierática
y se va de la brisa,y seguimos viviendo cual caminante
ya que sólo el cerebelo nos da vida y aguante.
Renacerá el amor allí donde lo perdimos,porque la esencia
del dolor sigue viviendo conmigo,
pero el tiempo que pasa como acordeon de pedigüeño
nos habrá demostrado cuanto hemos dejado en el silencio.
De mi mente a mi cuerpo va mi lamento
mas sufrir si se puede y no miremos el tiempo
Tengo un hilo de plata y tus recuerdos
quiero volar la cometa de mi sufrimiento
nunca pensé el dibujo del mañana y sentí
como sería tu sonrisa tras mi ventana
cuando la piel envejece y escuchas lo absurdo
como lo esencial se va de este mundo
y el fango de nuestras necesidades imperiosas
crece como una piraña en una cloaca de focas
y ese hilo cada vez mas fino y alargado, que lejos
se va de mi mano,y suspiro y no arreglo este entuerto
y ya las tumbas sin fuegos fatuos,ennegrecen de hollín
como el corazón de un hermano,y ya no hay odio
ni rencor,ni dolor mas grande que pensar en lo dado.
Pero en abril florece la sonrisa pero es hierática
y se va de la brisa,y seguimos viviendo cual caminante
ya que sólo el cerebelo nos da vida y aguante.
Renacerá el amor allí donde lo perdimos,porque la esencia
del dolor sigue viviendo conmigo,
pero el tiempo que pasa como acordeon de pedigüeño
nos habrá demostrado cuanto hemos dejado en el silencio.
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